¿Cómo eliminar el salitre de las paredes?

Todos hemos visto aparecer esas manchas tan feas que arruinan el aspecto de nuestras paredes. La pintura humedecida, con burbujas de aire o descascarada o; en los casos más severos, el tarrajeo carcomido son realmente estresantes… Y por más que intentamos parchar el daño, las dichosas manchas vuelven a aparecer. ¿Qué estamos haciendo mal?

‍Antes de pensar en reparar cualquier muro ante la desesperación de ver su rápido deterioro, es importante que resuelvas el misterio de fondo: ¿qué es lo que provoca la aparición de las manchas? Recuerda: el salitre es solamente el síntoma visible de un problema más profundo. Identificarlo es la única forma de evitar que reaparezca.

Ten en cuenta, además, que no se trata de un asunto únicamente estético ni superficial. Estas manchas de salitre, si no son reparadas a tiempo, pueden traer una serie de consecuencias mucho más graves, como el surgimiento de moho y hongos, y la proliferación de polvo y ácaros, los cuales potencian enfermedades respiratorias como el asma o la rinitis.

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¿Cuáles son las causas?

Toda mancha de salitre puede ser provocada por tres tipos de humedad:

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1) Humedad por capilaridad

‍Se produce por falta o falla de las capas aislantes que deben evitar que la humedad que hay en el terreno ascienda hacia la cimentación y los muros. Esta humedad trae consigo sales que, a diferencia del agua, no se evaporan: al contrario, se acumulan en la superficie y generan las típicas eflorescencias salinas y la degradación del tarrajeo. ‍

2) Humedad por infiltración de agua‍

Ocurre cuando la lluvia entra en contacto con las paredes exteriores y estas absorben el agua y las sales contenidas en ella.‍

3) Humedad por fugas de agua

Es ocasionada por un defecto o una rotura en una de las tuberías de la vivienda. En este caso, hablamos de un problema puntual que un gasfitero o albañil podrá solucionar.
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¿Cómo reparar una pared con salitre?

Una vez que has identificado el problema de fondo, puedes pasar a reparar la pared afectada por salitre. Para ello, hay que seguir cuatro pasos:

PASO 1: Identificar si el daño es superficial o severo
En el primer caso, observarás solamente el desprendimiento de la pintura. En el segundo caso, además, verás que el tarrajeo detrás de la pintura está degradado o carcomido.

PASO 2: Retirar la pintura y el tarrajeo
Si se trata de un caso superficial, solo tienes que retirar con una espátula la pintura descascarada y, con un cepillo de acero o de cerdas duras, desbastar hasta 2 milímetros del tarrajeo. En caso de que el daño sea severo, tendrás que picar con mayor profundidad todas las zonas en las que el tarrajeo antiguo esté flojo, con globos de aire, hueco, con manchas de humedad o con eflorescencias de salitre.

Para prevenir una futura aparición de salitre en la misma zona, será necesario aplicar ácido muriático u otro producto neutralizador, y dejar que este penetre en el muro por aproximadamente 20 minutos. Después, debes lavar el área con abundante agua caliente.

Es importante precisar que este paso se debe realizar con un margen extra, comenzando al menos a 10 centímetros de la presencia del salitre, sobre la zona de la pared que aún está sana.

‍PASO 3: Aplicación de tarrajeo
En un caso de daño superficial, después de humedecer la pared, solo necesitarás aplicar una mano de tarrajeo fino y dejar secar durante 48 horas para un óptima adherencia. En un caso severo, se debe aplicar una mano de tarrajeo grueso para sellar y nivelar el muro, dejar secar durante cinco horas, y luego aplicar una segunda mano de tarrajeo fino para el acabado final.

Hay distintos tipos de mortero que puedes utilizar para el tarrajeo. La opción más práctica es comprar las preparaciones listas que encontraremos en cualquier tienda de materiales para el hogar (a estas, solo deberás añadir agua hasta conseguir la consistencia adecuada).

Por lo general, los morteros para tarrajeo grueso suelen estar compuestos por arena y cemento; en cambio, los morteros para tarrajeo fino están hechos con arena y cal aérea hidratada. Las proporciones varían de una marca a la otra, y a veces suelen incluir otros ingredientes, como granulado volcánico o piedra pómez.

Solo en el caso de la reparación de una pared exterior se recomienda usar productos hidrofugantes que ayuden a impedir el ingreso del agua de lluvia en el muro. En caso de usarse para paredes interiores, estos productos desequilibrarían el ciclo de hidratación y deshidratación de la pared, generando grietas y nuevas apariciones de manchas de salitre, por lo que no son recomendables.

‍PASO 4: Pintura
Una vez que el tarrajeo fino haya secado por completo (después de 48 horas), podrás lijar las últimas asperezas y aplicar las manos de pintura que creas necesarias (dos es un número ideal). No recomendamos utilizar enduido plástico ni pinturas al óleo o al aceite, ya que estas no permiten que las paredes “transpiren” y, por lo tanto, prevengan la acumulación de humedad. Lo ideal, para cualquier pared reparada por salitre, es aplicar pintura al agua o pintura látex con cualidades antisalitre o antihumedad.

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Mantenimiento a las paredes

Si la solución ha sido únicamente la limpieza del salitre, lo más probable es que este problema reaparezca al poco tiempo. Para contrarrestar su avance, puedes hacerle mantenimiento cada 10 meses a una pared curada; de esa forma, el salitre podría aparecer recién en 2 o 3 años, y probablemente no en la misma zona.

Sin embargo, lo único que garantiza una solución definitiva es encontrar el problema de fondo (¿qué tipo de humedad es la que está provocando la aparición del salitre?) y, de ser necesario, contactar a un profesional para que se encargue de repararlo.